viernes, 18 de noviembre de 2022

Pensamientos

 Ha pasado ya bastante tiempo desde que escribo algo por acá, olvidando por completo lo que antes me gustaba hacer. O por lo menos una de las que me gustaban hacer: Escribir. 

No fue sino hasta unas semanas (quizás meses) en donde me atreví a leer la última historia que escribí, y que de hecho me gustaba mucho la trama y los personajes que le armé. Aún los quiero mucho.

Pero la verdad es que no me he dado el tiempo para gozar de cosas que me gustaban antes, solo me he quedado con las series y los animes. Hasta a veces sentarme a escuchar música es muy ocasional. Ya no es porque hago proyectos o algún trabajo de la universidad. Ahora es por tener algo de fondo mientras trabajo. 

Es increíble pensar como una vez estaba creo que gozando más de lo que me distraía que ahora solo siento es frustración. 

La etapa adulta es frustrante. Es mi conclusión.

Ya no te preocupas por notas, por horarios. Ahora te preocupa es el dinero. 

Dinero, es lo que creo que es el fondo de frutración de todos.

Claro, dicen que el dinero no te da felicidad, pero yo creo que si te puede dar aunque sea un poquito, aunque sea una pizca más de estabilidad emocional.

Podría sentirme mal e ir a comprarme un helado, y me haría sentir mejor. Quizás aun siga triste, pero diablos, que buen helado ¿no?

Quisiera escribir algo más motivante, pero sé que cada uno de nosotros estamos en nuestra propia batalla interna y no es fácil lidiar con eso todos los días. Estamos haciendo lo mejor que podemos. De eso no hay duda. Y con el hecho de llegar a dónde estás, sabemos que no fue fácil. ¡Ánimos!